La dieta mental: el hábito que más transforma tu capacidad de manifestar
Share
A veces cuidamos lo que comemos, tomamos agua, vamos al gym,
pero no cuidamos lo que pensamos.
Y lo que nutre (o intoxica) más rápido tu realidad no es lo que entra por la boca,
es lo que entra por tu mente.
La dieta mental es eso: una desintoxicación de pensamientos, emociones y energía.
Es dejar de darle de comer a la duda, al miedo, a la comparación,
y empezar a alimentarte de fe, merecimiento, calma y certeza.
Porque no puedes manifestar abundancia si todos los días repites “no tengo dinero”.
No puedes atraer amor si constantemente piensas “siempre me dejan”.
Tu mente es un campo fértil, y todo lo que siembras ahí,
tarde o temprano florece....
Una dieta mental no se trata de negar lo que sientes,
sino de elegir con conciencia qué pensamientos sostienes.
De hacerte responsable de tu frecuencia,
de decir: “hoy no le doy energía a lo que me drena,
hoy solo alimento lo que quiero expandir.”
Cuando haces eso,
la ansiedad baja, el cuerpo se regula y las cosas empiezan a fluir.
Porque la manifestación no ocurre desde el esfuerzo,
ocurre desde la coherencia:
cuando lo que piensas, sientes y haces están alineados.
cada vez que te caches en un pensamiento que te limita,
no lo pelees, solo cámbialo de plato.
Por ejemplo, si piensas “no me va a escribir”, di:
“en esta línea del tiempo, mi persona especial me elige, me busca y me ama con claridad.”
Y si piensas “no me alcanza el dinero”, cambia a:
“el dinero siempre fluye hacia mí de manera fácil y constante.”
Hazlo simple, hazlo consciente, hazlo diario.
Porque tu mente es la cocina donde se prepara tu nueva realidad